‘Copywriting’ o cómo conseguir tus objetivos con cada palabra

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Escritura persuasiva, cómo vender más y mejor a través de tus textos online, cómo llamar la atención del cliente en una sola frase… El arte del denominado “copywriting” o “redacción publicitaria” (aplicado al mundo digital) no es otro que el de saber contar aquello que las marcas quieren contar de la forma más sencilla, atractiva e influyente posible, de tal forma que el consumidor, con una sola lectura, averigüe las cualidades fundamentales del servicio o producto que queremos presentar y por qué ha de comprarlo.

Sin embargo, esta es la definición más simplista que podríamos ofrecer a cualquier persona interesada en la materia porque, en realidad, el copywriting es mucho más que eso, es saber plasmar el espíritu de esa empresa-cliente-marca-institución-organización sobre su página web o canales sociales corporativos, de tal forma que toda su presencia online gire en torno a una idea, condense su personalidad.

Un buen redactor ha de elegir convenientemente cada palabra para llegar a su público objetivo y conquistarle con un solo párrafo

Pero el copywriting es también el arte de ayudar a un cliente a alcanzar sus objetivos mediante el contenido digital sin que estos tengan que significar, a la fuerza, un aumento de los beneficios económicos, al menos a corto plazo. Admitámoslo, no todas las marcas necesitan vender más ni todas las instituciones obtener una rentabilidad económica inmediata a cambio de la prestación de un servicio, a menudo, los retos que se nos plantean van más en la línea de la reputación y de la consecución de fieles seguidores, es decir, de la fidelización, y nada mejor que un contenido dirigido a tales fines para lograrlo.

Ofrecer experiencias emocionales, ligadas al uso de determinados servicios o productos, mediante mensajes claros y concisos es uno de los grandes retos de un buen copywriter

Brindar una imagen de marca más amable tras una crisis de reputación online, convertir una empresa en un auténtico referente respecto a un tema concreto, desmarcarnos de la competencia o convertir un logotipo en el símbolo de un estilo de vida son retos a los que nos enfrentamos quienes redactamos contenidos para páginas web diariamente, retos que asumimos a través de la creación de contenidos digital de alta calidad, es decir, muy estudiados, orientados, perfectamente redactados, revisados y medidos.

Desde la redacción de los textos estáticos de una página web corporativa al completo desarrollo de las fichas de un producto, en presencia digital, todo cuenta

Quizás por esta razón, la figura del copywriter o redactor de contenidos online se ha convertido en un pilar fundamental del Inbound Marketing, del Marketing de Contenidos y del desarrollo de cualquier estrategia digital que tenga que ver con la atracción de clientes, seguidores, fans o, simplemente, lectores.

ATRACCIÓN Y POSICIONAMIENTO

Cómo hemos comentado muchas veces, los contenidos pueden cambiar la vida de cualquier negocio. Y es que, además de crear comunidad, incrementar el tráfico hacia una página web mediante la calidad o incentivar a las compras a través de las llamadas a la acción, los contenidos deben trabajar esas tres letras tan perseguidas por cualquier copywriter, el famoso SEO, es decir, que además de escribir para el usuario, debemos escribir para el principal motor de búsquedas del momento, Google, por lo menos si lo que buscamos es mejorar nuestro posicionamiento online y, hoy en día, este aspecto es decisivo para cualquier empresa, mucho más si hablamos de e-commerces.

Así que a la tarea de escribir bien, hacerlo con gracia, de forma creativa, original, transparente, sencilla, amena y atractiva, se une la necesidad de hacerlo acorde a ciertos criterios que Google tendrá muy en cuenta a la hora de posicionarnos, eso sí, debemos encauzar esta tarea de forma discreta, al fin de cuentas, quienes nos importan son nuestros lectores-clientes y serán ellos a quienes debamos tener muy presentes una vez nos enfrasquemos en la redacción.

En este sentido, el uso de las palabras clave adecuadas y la aplicación de ciertas normas ortográficas y estilos de redacción (en especial, si queremos adaptar nuestros contenidos a dispositivos móviles) nos ayudarán a crear un texto eficaz y rentabilizado al máximo.